Isidoro de Sevilla y su tiempo

 
 
Otras obras
 
 
 

“La Hispania” es una serie de cánones conciliares correspondientes a concilios griegos, africanos, galos e hispanos, además de un centenar de  epístolas pontificias ordenadas cronológicamente. “La Hispania fue precedida desde mediados del siglo VI por un índice formado por el extracto de los cánones, y constó de tres recenciones: la Isidoriana, correspondiente a la redacción primitiva, la Juliana de la época de San Julián de Toledo) y la vulgata, o edición más difundida y utilizada, que habría de ser bien conocida en las Galias y que influyó además en otras colecciones canónicas posteriores”. (Isidoro de Sevilla, Wikipedia).

“Historia de los Godos, Vándalos y Suevos”, recoge la historia de los pueblos que habitaban en Hispania en el siglo V. En lo que respecta a los godos, abarca del año 265 al 624. A veces entra en contradicciones, por las diferentes fuentes que usa. Comienza su libro con una “alabanza a España” (‘Laus Spaniae’), que dice:
 
“Tú eres, oh España, sagrada y madre siempre feliz de príncipes y de pueblos, la más hermosa de todas las tierras que se extienden desde el Occidente hasta la India. Tú, por derecho, eres ahora la reina de todas las provincias, de quien reciben prestadas sus luces no sólo el ocaso, sino también el Oriente. Tú eres el honor y el ornamento del orbe y la más ilustre porción de la tierra, en la cual grandemente se goza y espléndidamente florece la gloriosa fecundidad de la nación goda. Con justicia te enriqueció y fue contigo más indulgente la naturaleza con la abundancia de todas las cosas creadas, tú eres rica en frutos, en uvas copiosa, en cosechas alegre... Tú te hallas situada en la región más grata del mundo, ni te abrasas en el ardor tropical del sol, ni te entumecen rigores glaciares, sino que, ceñida por templada zona del cielo, te nutres de felices y blandos céfiros... Y por ello, con razón, hace tiempo que la áurea Roma, cabeza de las gentes, te deseó y, aunque el mismo poder romano, primero vencedor, te haya poseído, sin embargo, al fin, la floreciente nación de los godos, después de innumerables victorias en todo el orbe, con empeño te conquistó y te amó y hasta ahora te goza segura entre ínfulas regias y copiosísimos tesoros en seguridad y felicidad de imperio.” (Trad. de Rodríguez Alonso, en su ed. de San Isidoro de Sevilla, Historia de los Godos, Vándalos y Suevos, 1975, León, pp. 169 y 171.).
 
 
“La fuente principal de su historia temprana era la de Jerónimo de Estridón, continuación de la de Eusebio de Cesarea en el año 378. De ahí en adelante usa principalmente la de Orosio (hasta 417) y, para España, Hidacio (hasta 469). Para su historia posterior se basa en Prosper Tiro, continuación de Jerome (405-453). Víctor de Tunnuna es su principal testigo de África en los años 444 a 566 y Juan de Biclaro para la historia española reciente (565-590). Isidoro también hizo uso de una crónica, perdida en parte, de Máximo de Zaragoza. Para los eventos en España entre 590 y 624 Isidoro es la fuente principal del historiador.”  (Historia de regibus Gothorum, Vandalorum et Suevorum, Wikipedia)

“De fide catholica contra Iudaeos” (“Sobre la fe católica contra los judíos”) es un libro antijudío. Desde la conversión de los visigodos al catolicismo (finales del siglo VI), en aras a conseguir el reforzamiento del poder central, la política contra los judíos ocupa un primer plano hasta la llegada de los musulmanes a comienzos del siglo VIII. Isidoro se apoya en Agustín de Hipona para defender sus tesis. “Trata de las profecías Mesiánicas, del paso de la Antigua Ley, y de la Revelación Cristiana. La primera parte habla de la Segunda Persona de la Trinidad, y su regreso al final de los tiempos. La segunda parte se presenta la increencia de los Judios, del llamado a los Gentiles, y de la superación del Sabbath. En su conjunto es una apelación a los judíos para que acepten el Cristianismo.” (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm). Las ideas de Isidoro sirvieron de justificación ideológica a las persecuciones de judíos de los siglos XI al XIII en toda Europa.
 
“Similar en su carácter general a las "Etymologiae" es un trabajo titulado "Libri duo differentiarum". Los dos libros de los cuales este se compone se titulan respectivamente, "De differentiis verborum" y "De differentiis rerum". El primero es un diccionario de sinónimos que trata de la diferencia entre palabras con una considerable erudición, y no poca ingenuidad; el último es una exposición de ideas teológicas y ascéticas, tratando en particular acerca de la Trinidad y de la naturaleza humano-divina de Cristo. Probablemente fue inspirado por un trabajo similar de Cato como suplemento a los primeros dos libros de las "Etymologiae".” (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm)
 

Escena agraria
 
“El "Synonyma", o, como este es llamado a causa de su peculiar desarrollo, "Liber lamentationum", es en alguna manera ilustrativo del primer libro de "Differentyae". Este es pensado en la forma de un diálogo entre el Hombre y la Razón. El peso general del diálogo es que el Hombre lamenta la condición a la que ha sido reducido por el pecado, y la Razón lo conforta con el conocimiento de cómo puede él pese a todo alcanzar la felicidad eterna, la segunda parte de este trabajo consiste en una disertación acerca del vicio y de la virtud. El "De natura rerum", manual de física elemental, fue compuesto a petición del Rey Sisebuto, a quien es dedicado. Trata acerca de astronomía, geografía, y otras cosas. Es uno de los más conocidos libros de Isidoro y gozó de una amplia popularidad durante la Edad Media. La autenticidad del "De ordine creaturarum" ha sido cuestionada por muchos críticos, bien que aparentemente sin una buena razón. Arévalo sin dudar lo atribuye a Isidoro. Está dividido en varias cuestiones espirituales y físicas, tales como la Trinidad, las consecuencias del pecado, el océano, los cielos y los cuerpos celestiales.”  (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm)
 
“"De viris illustribus" es un trabajo de biografía Cristiana y constituye uno de los más importantes capítulos de la literatura patrológica. Al número de ilustres escritores mencionados allí Braulio agregó el nombre del mismo Isidoro. Un corto apéndice con una lista de teólogos españoles fue añadida por un discípulo de Braulio, Ildefonso de Toledo. Es una continuación del trabajo de Gennadius, un sacerdote Semipelagiano de Marsella, que escribió entre el 467 y el 480. Esta obra de Gennadius fue a su vez una continuación del trabajo de San Jerónimo.” (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm)
 
“Entre los escritos de Sagrada Escritura y Teología de San Isidoro los siguientes son especialmente dignos de mención:
 
"De ortu et obitu patrum qui en Scriptura laudibus efferuntur" es una obra que trata de las más notables personalidades de las Escrituras. Contiene más de un pasaje que a la luz de los modernos estudios es ingenuo o fantástico. La cuestión de la autenticidad ha sido planteada aunque completamente sin razón con respecto a esta obra.
 
"Allegoriae quaedam Sacrae Scripturae" trata del alegorico significado que se le asigna a los más conspicuos caracteres bíblicos. En total son doscientos quince personalidades del antiguo y del nuevo testamento que son en ella tratados.
 
"Liber numerorum qui in Sanctis Scripturis occurrunt" es una curiosa disetación sobre el significado místicos de los números en las Escrituras.
 
"In libros Veteris et Novi Testamenti prooemia", como su nombre lo indica es una introducción general a las Escrituras, con una especial introducción para algunos libros del Antiguo y del Nuevo Testamento.

 
"Secretorum expositiones sacramentorum, seu quaestiones in Vetus Testamentum" es una traducción mística de los libros del Antiguo Testamentyo Génesis, Éxodo, Levítico, Números, Deuterononio, Josué, Jueces, Reyes, Esdras y los Macabeos. Está basado en los escritos de los primeros padres de la Iglesia.” (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm)
 
“"Sententiarum libri tres" es un compendio de teología dogmática y moral. Gregorio el Grande y San Agustín son los que más contribuyen en su contenido. Los atributos divinos, la creación, el mal, y otros varios aspectos son tratados en el primer libro. El segundo tiene un variado carácter mientras que el tercero trata de las órdenes eclesiásticas, del juicio y del castigo de Dios. Se cree que este libro influenció grandemente a Pedro Lombardo en sus famosas "Book of Sentences".
 
“"De ecclesiasticis officiis" se divide en dos libros, "De origine officiorum" y "De origine ministrorum". En el primero Isidoro trata del culto Divino y particularmente de la liturgia Española antigua. Contiene además una lúcida explicación de la Santa Eucaristía. El segundo trata de la jerarquía de la Iglesia y de los varios estados de vida. En este mucha interesante información puede ser cencontrada con relación al desarrollo de la música en general y de sus adaptaciones al las necesidades del Ritual.
 
“"Regula monachorum" es un modo de vida prescrito a los monjes, y además trata de una manera general acerca del estado monástico. El escritor da abundantes pruebas de la democracia Cristiana en la vida religiosa por cuanto permite el acceso a todo hombre a cualquiera nivel y estado de vida. Ni siquiera los esclavos fueron excluidos. "Dios", dice, "no ha hecho diferencia entre el alma del esclavo y aquella del libre". Insiste en que en el monasterio todos son iguales a los ojos de Dios y de la Iglesia.”  (Isidoro de Sevilla, San, http://ec.aciprensa.com/i/isidoro.htm)
 
Suya es  una historia universal denominada ‘Chronica Majora’. Basándose “en los trabajos de Rufino, Flavio Josefo, Justino, Eusebio, Julio Africano, traza en 122 parágrafos la historia del mundo. En pos de San Agustín, esta historia universal está dividida en seis edades simbolizadas por los seis días de la creación. Las cuatro primeras edades son las etapas de la historia judía hasta la cautividad de Babilonia; la quinta, a partir de esta época, engloba con el relato de la liberación por Darío rey de los persas los episodios del Reinado de Alejandro Magno y de los ptolomeos de Egipto, y llega hasta el nacimiento de Cristo; la sexta comienza con César y abarca los reinados de los emperadores romanos hasta el decimoquinto año de Heraclio, o sea el 6l6 de la Era Cristiana. Allí se insertan los acontecimientos de España: la invasión del país por los godos, los vándalos y los suevos; luego, las luchas entre estos pueblos bárbaros, las cuales terminan con la victoria decisiva de los “fuertes”, los godos; en fin, después de la heroica insurrección de Hermegenildo, la conversión al cristianismo de Recaredo, la cual trae consigo la de todo su pueblo. Con un orgullo netamente español habla San Isidoro de su país: “Más bello que todos los demás, perla y ornato del universo”. (San Isidoro de Sevilla. Internet)
 
También escribió un tratado místico sobre los significados alegóricos de los números y una serie de cartas breves.


Todas estas obras están escritas en latín.